Chenin Blanc
Uva de la variedad Syrah
De 22 variedades que se probaron, solo 8 se adaptaron perfectamente al lugar. Entre estas destacan: El Chenin Blanc, Syrah, Tempranillo. En cambio, el Sauvignon blanc, una variedad muy buscada, se adaptó mejor en Humocaro, en donde la altura es mayor.
Espalderas
Las uvas pueden ser cultivadas en parras (a la altura), lo cual es ideal para uvas de mesa, o en espalderas, que facilitan la recolección en la vendimia (época en la cual se recogen las uvas). Después de visitar las viñas, nos trasladamos a Carora, en donde se envía la uva una vez recolectada. Allí nos reciben con una deliciosa y refrescante "Sangría Caroreña", la cual ha sido preparada con vino tinto, parchita y mora.
La uva llega en camiones. Se pesa y se descarga. Las uvas para el vino tinto por un lado, las del vino blanco, por otro. Para preparar una botella estándar de 750ml, hace falta aproximadamente un kilo de uvas.
La uva es pasada por una máquina que separa las uvas por un lado y los racimos y el material de desecho por otro. Este material es usado posteriormente como abono.
El líquido extraído es pasado a unos tanques inmensos de acero inoxidable, en donde se realiza la fermentación de la uva, al añadirse levadura, después de unos quince días.
Posteriormente, los vinos de reserva y de calidad son pasados a barricas de roble, en los cuales se dejan entre 5 meses a un año y medio. Los vinos tipo champaña, requieren un proceso distinto, mucho más complejo y largo. En efecto, la uva se cosecha antes, para que sea menos dulce y posteriormente, se hace una segunda fermentación.
Posteriormente, el vino es embotellado, se le añade el corcho, la etiqueta y es colocado en cajas, que es la forma como es transportado hasta el lugar de venta.
Los vinos terminados están ya listos para su venta, en botellas muy bien presentadas, apetecedoras
Y a los visitantes, les toca la parte más agradable. El catar los vinos, acompañándolos con unos quesos locales. ¡Que bien sabe el vino, después que uno ha visto como se prepara!